Las personas adultas solemos retirarnos, cuando nos separamos o nos alejamos de un lugar, persona o circunstancia de manera reflexiva y ordenada. Y huimos cuando nos alejamos de un lugar, persona o situación, con prisas y en algunos casos de manera violenta o incluso «a escondidas» de los demás. huída
- Cuando una de estas dos cosas ocurren, no nos es nada fácil saber distinguir de manera objetiva, cuando debemos huir o cuando debemos retirarnos de algunos lugares, personas o circunstancias en conflicto con nosotros.
- Que no nos sea fácil saber lo que tenemos o debemos hacer con nuestras huidas o retiradas, no nos exime de responsabilizarnos de lo que hacemos…
«Deberíamos tener claro cuando huimos o nos retiramos… y porque..»
Saberlo nos ayudará a nosotros mismos, nuestra familia, nuestro trabajo y a la sociedad en general…¿Conoces tu posible reacción ante determinadas circunstancias, personas o lugares?
- Cuando te encuentras con un conflicto o lo has generado tu … ¿Huyes o te retiras?
- Cuando vives una situación que te preocupa y no sabes que hacer… ¿Huyes o te retiras?
- Ante un conflicto conyugal… ¿Huyes o te retiras?
- Ante un embarazo inesperado….¿Huyes o te retiras?
- Cuando llegas al límite de una situación personal con un amigo… ¿ Huyes o te retiras?
- Ante los conflictos que genera la educación en nuestros hijos adolescentes… ¿Huyes o te retiras?
- En tus viajes de placer o vacaciones familiares… ¿Huyes o te retiras?
- Ante una injusticia o manipulación laboral… ¿Huyes o te retiras?
- Cómo te enfrentas a la adversidad… ¿Huyendo o retirándote?
- Cada día… ¿Qué esperan los demás de ti… ,que huyas o que te retires?
La huída hacia adelante parece que da soluciones, pero es un espejismo porque solo retrasa futuros conflictos. La buena educación de nuestras emociones y sentimientos nos debe exigir «una retirada a tiempo» para ser capaces de gobernar nuestros pensamientos en los momentos difíciles. Más vale tardar cinco minutos más en saber que debes o no hacer, que ahorrarte media hora huyendo hacia delante a la espera de acontecimientos…
No tengas prisa en decidir algo cuando te sientas incomprendido y con tu «libertad comprometida» ante los valores que soportan tu vida.
«Ganar tiempo al tiempo, a veces es perderlo, perder el tiempo, a veces es ganarlo ante una buena y reposada reflexión personal»
Retírate de la vida para reflexionar e incorpórate a la vida con tus objetivos y pautas claras que coincidan con tus valores y no con las carencias de la sociedad actual. La huida esta gobernada por el miedo, el miedo no te deja pensar racionalmente y no poder pararte, impide una retirada a tiempo.
«Tomate tu tiempo para serenarte y después actúa…pero actúa siempre, no dejes de hacerlo» |