¿Os acordáis cuando os conté que había estado en un pase privado con el productor de la película «Encontrarás Dragones», Ignacio García Sancha y que con ese motivo estuvimos reflexionando sobre la felicidad?.
La realidad mundial que se palpa no solo en las cárceles sino en todos los actuales enfrentamientos bélicos mundiales, nos debe invitar a pensar sobre la realidad humana de «Perdónate-perdóname-perdónale».
Entender el perdón sin tener libertad es algo grande.
Todas las condenas y las guerras civiles han tenido, tienen y tendrán un alto contenido de culpabilidad y sobre todo de falta de perdón. Es precisamente la actitud de perdón de los hombres, la que puede reconvertir los dramas humanos en historias de grandes personas que son capaces de soñar con un mundo mejor, gracias al «perdón».
Para los que vivimos en un país en paz y en libertad y no la hayáis visto todavía, ir a ver «Encontrará Dragones». Es un buen plan familiar y/o social que os puede dar lugar después de verla, a una muy buena conversación sobre «la realidad de la amistad y el perdón». Perdónate-perdóname-perdónale
Pero también os digo no es película para ir a verla con niños entre los 12 ó 14 años. Ni la temática, ni el contenido de algunas escenas es recomendable para menores.
No es una película ni mística ni dulce, es una gran película con un alto contenido emocional.